Antología poética "Yo poeta declaro"
Reseña sobre el libro Antología poética “Yo poeta declaro”, de Agustín Millares Sall.
Hablar de un libro de poesía no siempre es fácil, y más cuando el autor está consagrado y muerto. Puede ser un atrevimiento cuando una es una simple lectora y aprendiz de poeta.
Cada libro tiene su público. Lejos de la poesía que me gusta, se encuentran estos poemas. Eso no quiere decir que no me haya gustado ninguno, luego les diré con cuáles me quedo y por qué.
Esta es una antología creada por el Gobierno de Canarias y prologada por el entonces presidente Paulino Rivero, con motivo de la celebración del Día de las Letras Canarias. Este día de celebración tiene como objetivo distinguir a las personalidades de nuestro patrimonio literario que mejor hayan conectado con el latir de las Islas, de ahí que en 2014 eligieran a Agustín Millares Sall.
Pero, ¿quién fue Agustín Millares Sall?
Es considerado un poeta clave en la generación de la poesía social en Canarias. Nació en Las Palmas de Gran Canaria el 30 de junio de 1917 en el seno de una familia muy implicada en el mundo de la cultura. Su padre fue el afamado poeta Juan Millares Carló. Y fue hermano de una saga de grandes artistas como el gran pintor y grabador Manolo Millares, el artista del humorismo gráfico Eduardo Millares, el poeta José María Millares Sall, el gran timplista Totoyo Millares y de la pintora Jane Millares Sall.
Toda su obra lleva el sello del compromiso ético. Fue miembro de la Antología Cercada y de Planas de Poesía. Entre sus obras destacan algunos títulos significativos como Poesía Unánime, Segunda Enseñanza, Función al Aire Libre.
Murió con 72 años, en Las Palmas de Gran Canaria, en 1989.
Y después de saber quién es, ¿me voy a atrever a criticar su obra? Pues no, porque no me la he leído entera. Solo voy a hablar de esta antología que presenta aproximadamente 55 poemas de diferentes años y libros.
Estos poemas encierran un instinto de compromiso y lucha social, por ejemplo en la página 40 en el poema La sangre, con el verso “Lo que nos mueve”, dice así en la segunda estrofa:
Lo que nos mueve realmente
a los hombres a seguir adelante,
incluso por caminos diferentes,
y a cantar cada uno –cuando puede–
como sabe,
es algo que todos llevan en caliente,
a golpes de corazón: la sangre.
Este poema en particular, cuyo título ya nos desvela a qué hace referencia lo que nos mueve, carece de artificio y con un lenguaje sencillo hace un manifiesto de la fuerza del ser humano.
Suele utilizar la rima asonante y consonante, y aunque algunos poemas engañen con una aparente versificación libre, no la tienen. Las estrofas sí que no mantienen un número igual de versos, pero la métrica sí suele respetarla. Encuentras poemas con muchas anáforas, repitiendo palabras al comienzo de los versos y de las estrofas, intentando darle mayor sonoridad al poema. Un ejemplo es el poema “Como todas las cosas” o “Saludo” con el emblemático Yo poeta declaro (Título de esta antología).
Este libro tiene 66 páginas. Es una edición agradable y limpia, con un buen tamaño la tipografía utilizada.
Los tres poemas que he elegido y marcado con un pequeño papel autoadhesivo (ya reconocido por la RAE como pósit), herramienta que suelo utilizar en los libros de poesía para ir a tiro hecho cuando quiero repetir o recordar la lectura de algún poema que me haya gustado, son: “En nombre de otra cosa”, “Flash”, e “Indescifrable”, este último dedicado a su hijo Layo.
¿El por qué los elegí? Porque quizás encontré cierto atrevimiento por parte del autor, con metáforas más arriesgadas, como por ejemplo: un árbol sin cabeza, revolver en las sombras, o un zapato acribillado por los dedos.
Aún así, encontramos fallos como la repetición de la palabra notas en los versos 5 y 8 del poema en cuestión, “En nombre de otra cosa”. Por eso digo que le falta artificio a su forma de escribir. ¿No podría elegir otra palabra? Sonido, calambre, esencia, ritmo, energía; (de un instrumento musical sin notas.). Cualquier cosa hubiera servido. ¿Quizás es un poema poco trabajado? Creo que no, creo que está más centrado en la métrica que en el lenguaje. Y esto es muy difícil. La poesía es muy difícil.
La poesía llega de diferente forma a cada lectora, y también influye el estado en que te encuentres, emocionalmente hablando; Quizás ahora me gusten y dentro de unos meses o incluso semanas, no me agraden o me llamen más la atención otros.
Dejo por aquí un par de poemas como homenaje al poeta y por el día de la poesía, que es mañana 21 de marzo. ¡Feliz lectura!
En nombre de otra cosa
No dije nada en nombre de la historia.
Tenía que hablar en nombre de otra cosa.
Por ejemplo,
de un árbol sin cabeza,
de un bolsillo sin agenda de notas,
de un bosque sin maleza,
de un aire sin palomas,
de un instrumento musical sin notas.
De algo que ha estado siempre
haciendo mella en la vida del hombre
y que este se traga y nunca nombra.
Bien valía la pena
revolver en las sombras
para hallar el sonido de la cuerda,
remover las cenizas de una hoguera,
escarbar en la papelera
y en el estiércol.
Hacer sonar la hora,
hacer andar una sandalia rota,
un zapato acribillado por los dedos.
Podrido estaba el fruto en la corteza
y en el hoyo abonado de la tierra.
Tenía que hablar en nombre de otra cosa.
Agustín Millares Sall
FLASH
Habitantes del planeta estad al tanto
Aquí mirad aquí hacia este punto
negro del mundo
En cosa de segundos
de este agujero va a salir un pájaro.
Agustín Millares Sall
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