“EL GUARDIÁN ENTRE EL CENTENO”, DE J.D. SALINGER
Esta es la única novela del autor, publicada en 1951, aunque también escribió otros libros de cuentos.
Se convirtió en un clásico de obligada lectura. En el instituto, cuando estudié, no recuerdo haberla leído (como otros libros), por lo que era para mí una cuenta pendiente.
El libro es pequeño, apenas 228 páginas en la edición de bolsillo de Alianza Editorial.
Te mantiene enganchada desde el principio, habla en primera persona y tiene un estilo directo interpelando al lector. Empieza así: «Si de verdad les interesa lo que voy a contarles, lo primero que querrán saber es dónde nací, cómo fue todo ese rollo de mi infancia, qué hacían mis padres antes de tenerme a mí, y demás puñetas estilo David Copperfield, pero no tengo ganas de contarles nada de eso.»
Utiliza un lenguaje juvenil, moderno (para esa época), coloquial y desenfadado, lo que hace que el protagonista haga pie a la altura de sus lectores.
Habla de la adolescencia que como todos sabemos es una etapa complicada; eres mayor, pero no lo eres.
Holden Caulfield es un joven inteligente que no encaja en el sistema educativo impuesto. Con habilidad emocional, nos va relatando los días desde que lo expulsan hasta que vuelve a casa antes de las vacaciones de Navidad. Es una novela con una alta dosis de rebeldía, de búsqueda personal, de amor fraternal, de fracaso escolar. Podemos explorar la estructura familiar, el papel educativo de los progenitores, el seguimiento que le hacen al joven, la figura de todos los hermanos, sobre todo la más pequeña. Podemos identificar cómo vive el duelo de la pérdida de su hermano y cómo sobrevive la familia.
Caulfield es un joven errante en una jungla metropolitana, Nueva York. Hay drogas, alcohol, prostitución, abuso de menores, es un cóctel molotov.
Queda clara la desidia por vivir y el sentimiento de caída al precipicio. Sin embargo, a Holden Caulfield le gustaría salvar y proteger a otros niños y niñas que se puedan caer, por eso es el guardián entre el centeno.
Una narración limpia, nada aburrida. Aunque cuente relatos accesorios atrapa la lectura. Muy recomendable el libro.
Comentarios
Publicar un comentario
Deja aquí tu comentario