“BEIJING ENTONCES”, DE ALMA KARLA SANDOVAL

 


Llegué a este libro y a esta escritora mexicana por la inercia. Había leído otros textos de esta autora en la Revista Gafe, de la Editorial BGR. Y lo compré. Es un libro publicado en 2015, en la editorial Torremozas, con una edición limpia, de letra grande y buenos materiales (habitual en esta editorial). Un libro de 42 poemas cortos, algunos en prosa poética, de verso libre, con un tono oriental, con dragones, budas y oráculos. Tiene imágenes buenas, evocadoras, como el primer poema: ‘Bicicleta al este’, que termina con unos versos efectivos: [Queríamos tocar la constelación del Tigre, colgarnos sus colmillos, pero ya éramos dos presas que buscaba el universo.].


Los elementos de la naturaleza, como suele suceder en la literatura oriental, son los protagonistas de este libro. Podemos observarlo, por ejemplo, en la página 33, el poema: ‘Visión profunda de jardín a media tarde’, con versos como: [Nada rompe esta quietud de cristal en verde y blando, crudo en el agua por la trucha más negra del estanque, la solitaria que se niega a los espejos, …]; donde la quietud del agua y la contemplación son fuentes de bienestar, de calma. O en la página 47: ‘Tigre de madera’ que empieza así: [¿Es posible que del bambú nazca un felino?]. Un poema que da un giro, alejando el refugio del animal con la persecución de la que es objeto. ¿Qué savia correrá por sus venas?me pregunto.


Y como estas imágenes poéticas, hay muchas. La autora se muestra cómoda con la palabra, se deja llevar por la corriente, fluye con el poema: [Debería contar que huele a jamás humedecido, a una felicidad perpleja que se dobla como grulla de papel en el recuerdo.]; página 23, ‘Brindis de té’.

Poemas sugerentes para leerlos detenidamente, disfrutando, como siempre, de la buena poesía.

Lo recomiendo.

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